En las sociedades modernas, el envejecimiento es mucho más que una preocupación estética para las mujeres: es el principal factor de riesgo para numerosas enfermedades. Que hoy sea una prioridad para ti, depende de tu etapa de vida, pero, inevitablemente, será importante. El envejecimiento es un proceso universal, que depende del tiempo y que afecta a todas las personas.
Durante décadas, la investigación científica ha buscado comprender y mitigar los efectos del envejecimiento, pero por su complejidad, sigue siendo un gran desafío. Aunque comúnmente se asocia con cambios visibles—arrugas, cabello canoso y sabiduría acumulada—a nivel biológico representa un deterioro progresivo de la función celular y orgánica, impulsado por complejos mecanismos moleculares.
La pregunta fundamental persiste: ¿puede revertirse el proceso de envejecimiento o es un rumbo inevitable?
Como científica dedicada al estudio del envejecimiento desde múltiples perspectivas, yo trabajo para descubrir los mecanismos biológicos subyacentes que influyen en la longevidad y la salud, con el objetivo final de promover una vida más larga y saludable.
